Las 5 leyes biológicas, explicadas
En esta ocasión, compartiremos un fragmento del libro “La gran Confusion”
(se puede adquirir desde AQUI)
¿DE DONDE PROVIENE LA ENFERMEDAD?
Esta ley explica de donde provienen las enfermedades.
En primer lugar tenemos que entender que cuando decimos “LEY” hacemos referencia que siempre y en todo lugar se cumplirá. No es una hipótesis o una teoría, sino es una ley de la naturaleza que se cumple en el 100% de los casos y puede ser verificada por cualquier persona que lo desee.
Dentro de esta primera ley, tenemos tres criterios.
El primer criterio establece que:
- Todo cáncer o enfermedad equivalente al cáncer se produce por un DHS (Dirk Hamer Shock), es decir, un un choque biológico conflictivo altamente dramático, vivido en soledad, que afecta simultáneamente a los tres niveles (psique-cerebro-órgano).
El Segundo criterio establece que:
- El contenido del conflicto determina, en el momento del DHS tanto la localización del foco de Hamer en el cerebro, como la localización del cáncer o enfermedad onco equivalente en el órgano.
Como ya hemos visto, Marc Frechet fue un gran colaborador del Dr. Hamer.
Él lo ayudó a profundizar en los choques biológicos (DHS) y dar una definición mas precisa de la primer ley de la biologia.
Lo que descubrieron es que, el primer choque biológico (DHS) no genera lesión orgánica, es más como una alarma que deja a la persona en un especie de “estado hipnótico” y se ve perfectamente la diana concéntrica en fase activa, en la tac cerebral sin contraste.
Durante el “DHS alarma”, no hay destrucción celular, hay una estimulación neuronal. Puede distinguirse el Foco de Hamer del primer DHS que no produce SBS, pero no puede distinguirse de los siguientes que sí producen SBS.
“El primer shock produce un cambio en el cerebro, las esferas o anillos concéntricos que se ven en la TAC de cerebro sin contraste, son las neuronas afectadas por el DHS pero éste, inicialmente, no produce cambios en el órgano. Es una alarma y el cerebro está en estado de alerta para la supervivencia del ser vivo
El Dr hamer afirmó luego, que durante el “DHS alarma”, el cerebro selecciona los “Rails” ( que son las vías que llevan de regreso al conflicto), pistas, tracks o memorias sensoriales asociadas con el hecho conflictivo, es decir, ruidos, olores, aromas, fragancias, colores, sonidos, comidas, personas, lugares, etc, todo lo que pueda ser recibido por los 5 sentidos.
Cuando entra en contacto con el mismo conflicto o con un Rail asociado al conflicto que experimentó un tiempo atrás, tendremos el “detonante” que activará el programa biológico.
A partir de allí se empiezan a cumplir las 5 leyes de la biología.
Entonces, recién el segundo DHS será el detonador del SBS.
Por lo tanto hablamos de un proceso gradual.
Para entender este concepto pondremos un ejemplo:
Una niña diestra sufre su primer rechazo o conflicto sexual cuando su compañerito no quiere ser su novio. En ese momento se activa una “alarma” a nivel cerebral, afectando el relé cerebral para el cuello del útero y la vagina (y las venas coronarias), que se encuentra a la mitad del lóbulo temporal izquierdo en la corteza cerebral.
Algunos años mas tarde, luego de su primer conflicto sexual, experimenta la misma situación con su primer novio, lo que llamamos un mismo colorido de conflicto, cuando la deja porque ella aun no quiere tener relaciones sexuales. En este caso, este conflicto “sexual” será el detonante del programa biológico a nivel del cuello del útero, que se activará con un pleno sentido biológico.
Durante la fase activa, encontraremos el sentido biológico, el cual producirá un ensanchamiento ulceroso del cuello uterino, completamente asintomático junto con la posible aparición de anovulación e infertilidad en proporción a la masa conflictual (duración por intensidad del conflicto), lo cual suele diagnosticarse como amenorrea y frigidez.
En las mujeres adolescentes diestras, este choque biológico genera un comienzo tardío en la menstruación. Y durante la Fase de reparación aparecerá un carcinoma del cuello del útero, inflamación con hinchazón del exocervix, aquí puede ocurrir dolor y sangrado. Si se detecta durante la primera fase de reparación (PCL-A, es decir, post- conflictolisis-A) suele ser diagnosticado como cáncer de cuello uterino o cáncer de exocervix.
Una vez que el programa biológico está completo, la ovulación y la libido regresan.
Como verás querido lector la Medicina Germánica del Dr. Hamer, no son solo 5 leyes de la biología, sino que es una profunda ciencia desarrollada por el Dr Hamer que se aplica en todas las áreas de la vida.
Las 5 leyes biológicas son solo la punta del iceberg de esta ciencia.
Otro ejemplo podría ser el de un adolecente, cuyo padre pierde el trabajo, y desde ese momento debió salir a “ganarse la vida” para poder comer. Este sería el conflicto “Alarma” ya que inesperadamente sufre un conflicto de “carencia de algo vital, como es en este caso la comida”. Este conflicto alarma afecta el relé que controla el hígado que se encuentra en el tallo cerebral. Solo queda en estado de alarma porque es la primera vez que ocurre.
Luego de unos años, consigue un trabajo estable, se asienta, se casa y tiene dos hijos. Lógicamente como cualquier padre, el tema que más ocupa sus pensamientos es el de conseguir el alimento para su familia todos los meses. De repente, de una manera inesperada se entera de que su empresa va a cerrar y no podrá conservar su trabajo, ni su salario, lo que implica que tampoco podrá comprarle alimento a sus hijos.
Esta situación, es vivida en un contexto de choque biológico, ya que es dramático, inesperado y vivido en soledad sin solución inmediata, lo cual ahora si “detona” un programa biológico a nivel del hígado, generando durante la fase activa una proliferación celular o un tumor de hígado (adenocarcinoma plano o con forma de coliflor según la necesidad, ya que tienen funciones distintas), con el objetivo de tener un volumen más gran del hígado con el fin de mejorar la absorción de estos elementos vitales como el alimento o el dinero, ya sean reales o simbólicos y proporcionar sustancias energéticas adicionales. Es por esto que el pleno sentido biológico en el hígado se encuentra en la fase activa.
En caso de que aparezca un tumor secretor en forma de coliflor, éste secretará bilis, ya que el tumor estará formado siempre por células hepáticas y un estroma que es un tejido de sostén que recubre el tumor.
Es decir, el tumor representa una mejora biológica.
Este programa biológico es muy usado en la naturaleza, cuando por ejemplo un ciervo es alejado de su manada, mientras este ciervo pequeño no regrese con su manada, generará un tumor en el hígado para poder asimilar mejor cualquier yuyo que encuentre por el camino y así no morir de hambre, hasta resolver su conflicto y volver a la manada.
Si se encuentra durante la fase activa se diagnostica cáncer de hígado.
Para continuar con el ejemplo, este padre de familia que estaba destrozado por no poder alimentar a su familia, al borde de agotar sus ahorros, luego de dos meses de búsqueda incansable, consigue un nuevo trabajo mejor pago que el anterior.
Esto hace que inmediatamente resuelva su conflicto de “carencia de algo vital”, el cual estaba afectando el hígado. A los dos días luego de haber resuelto su conflicto empieza a tener unos fuertes dolores de hígado, producto de una fase de reparación en proceso.
Durante la fase de reparación, el tumor del hígado que proliferó durante la fase activa, se descompondrá, con la aparición posterior de cavernas en el hígado, gracias a la acción de las bacterias tuberculosas.
Aparecerán entonces fuertes dolores de hígado con intensas inflamaciones (proporcionales a la masa conflictual) llamadas cirrosis hepática, hipertrófica o atrófica. En caso de no disponer de las bacterias (efecto de antibióticos o vacunas) el tumor se encapsula y quedará inocuo dentro del hígado.
Si la masa conflictual es muy grande podría ocurrir la ictericia (la ictericia es cuando la persona se ve amarilla) como resultado de la compresión mecánica de la vía biliar principal.
Como verás querido lector, en todos los casos, debemos encontrar la alarma y el detonante del programa biológico con una rigurosa investigación.
¿COMO TRANSCURRE LA ENFERMEDAD?
Esta ley explica cómo transcurre una enfermedad.
Es la ley del carácter bifásico de las enfermedades que presentan solución al conflicto biológico. Es decir, toda enfermedad o sistema biológico y sensato de la naturaleza (SBS) tiene dos fases.
Una fase activa y una fase de reparación, siempre y cuando el conflicto se haya resuelto o producido la conflictolisis (CL), la cual indica que la solución del conflicto ha sido aplicada. No alcanza con conocer la solución, hay que resolver el conflicto.
El conflicto se puede resolver mediante una acción física o también mediante la comprensión de lo que ocurrió, evitando continuar de esa manera en conflicto.
Un paciente (el que soporta), que no haya resuelto su conflicto se encontrará en la primera fase, la de conflicto activo. Si consigue resolverlo, automáticamente entra en la segunda fase, la de reparación orgánica. Es importante saber que un choque biológico interrumpe inmediatamente el ritmo normal día-noche, e inicia la fase activa del conflicto.
El choque dispara el inicio de un Programa Biológico Especial y Significativo, que permite al organismo (psique, cerebro y órgano) incrementar el funcionamiento diario y enfocarse de lleno en resolver la situación imprevista.
En algunos casos, puede ser preferible no resolver el conflicto sino reducir su intensidad a un nivel razonable, antes que afrontar la segunda fase, la cual en algunos casos puede ser bastante difícil de atravesar.
¿COMO SE COMPORTA LA ENFERMEDAD?
Esta ley explica cómo se comporta la enfermedad.
Es el Sistema ontogenético de tumores y enfermedades análogas. Ontogénico quiere decir que todas las enfermedades en la medicina proceden de la historia evolutiva del ser humano.
La tercera ley de la biología explica cómo se comportan los órganos creados por las 4 capas germinales durante la fase activa y durante la fase de solución, si es que el conflicto ha sido resuelto.
Los órganos creados por el Viejo cerebro (Endodermo y Viejo Mesodermo) tienen una reproducción o proliferación celular durante la fase activa (crecimiento de un tumor plano o compacto con pleno sentido biológico). Durante la fase de reparación el tumor creado durante la fase activa (como mejora biológica), al no ser ya necesario es descompuesto y eliminado del cuerpo mediante la acción de las bacterias designadas por el cerebro.
Los órganos creados por el Nuevo cerebro (Nuevo Mesodermo y Ectodermo) tienen una necrosis, parálisis o úlceras respectivamente durante la fase activa del programa biológico, con pleno sentido. Durante la fase de reparación se rellenan las lesiones gracias al trabajo bacteriano.
La teoría estándar de las metástasis sugiere que las “células cancerígenas” de un tumor primario viajan a través del torrente sanguíneo o del sistema linfático a otras partes del cuerpo donde éstas producen un crecimiento “canceroso” en el nuevo sitio.
De acuerdo a las Cinco Leyes Biológicas, los cánceres secundarios y terciarios no son el resultado de células cancerosas que migran, sino de un segundo o tercer choque biológico, frecuentemente iniciado por un choque en el momento del diagnóstico o del pronóstico, que pone al individuo en una situación total de pánico, causando un nuevo conflicto o, más aún, varios nuevos conflictos, llevándolo a presentar cánceres adicionales.
Querido lector, seguramente te estarás preguntando a esta altura, ¿Cómo hizo el Dr. Hamer para realizar semejante descubrimiento?
Esta pregunta fue hecha al Dr. Hamer en 1992 en Colonia, Alemania y el Dr. Hamer respondió:
Descubrí el sistema ontogénico de los cánceres y enfermedades onco-equivalentes (parálisis motriz) tras la observación de aproximadamente 10.000 casos. Trabajaba en forma absolutamente empírica como cualquier buen científico debería hacerlo. Documentaba todos los casos que iba recolectando junto con los escáner de TAC del cerebro así como la evidencia histológica. Fue solamente cuando había ya juntado toda esa información y comparado los resultados cuando descubrí que había un sistema subyacente. Fue imponente, en particular porque jamás habíamos pensado que eso fuera posible.
Había muchos pacientes con tumores compactos que mostraban crecimiento celular en la fase de conflicto activo (o fase simpaticotónica) pero en otros casos crecían durante la fase de reparación (o fase vagotónica) después de haberse resuelto el conflicto (conflictolisis). Simplemente no podía tratarse de la misma enfermedad. Por lo tanto había dos formas de aumento celular:
- Una en la fase de conflicto activo
- La otra durante la fase de reparación.
Aquellas enfermedades que muestran una reducción o disminución celular (hoyos, necrosis o úlceras, también llamadas abscesos) en la fase de conflicto activo, tienen aumento celular en la fase de reparación. Comparé estos descubrimientos distintos y siempre percibí la presencia de este sistema. Aquellos tumores que durante la fase de conflicto activo formaban crecimiento celular, siempre tenían sus relés en el tronco cerebral y en el cerebelo. Estas dos porciones del cerebro en conjunto se denominan el “paleoencéfalo o cerebro antiguo”.
Todas las enfermedades cancerosas, por lo tanto, que manifiestan crecimiento celular durante la fase de conflicto activo, tienen su relé en el cerebro antiguo, que es de donde son dirigidas. Y todos los así llamados tumores, que son síntomas de reparación exuberante, que muestran aumento celular durante la fase de reparación, tienen sus relés en el cerebro nuevo (sustancia blanca y corteza cerebral).
Esta conexión sistemática fue descubierta en 1987 y fue denominada el sistema “ontogénico de los tumores y enfermedades cáncero-equivalentes”. Con la Ley Férrea del Cáncer y la Ley de que cada enfermedad ocurre en dos fases, la primera clasificación sistemática de la Medicina Germánica había sido establecida.
“Ontogénesis” significa el origen y desarrollo del ser viviente individual. “Ontogénico” significa relacionado con el desarrollo del ser individual. Por lo tanto, el sistema ontogénico de los tumores significa que ni la localización del Foco de Hamer en el cerebro, ni el tipo de tumor o necrosis que se desarrollan subsecuentemente ocurren al azar, ya que todo esto está lógicamente predestinado en la evolución histórica del ser humano.
Es muy importante a esta altura, olvidarse de las etiquetas que la medicina clásica da a las enfermedades, porque solo nos aleja de lo que realmente está ocurriendo en el cuerpo. Es por esto, que hay que prestar atención solamente a los síntomas reales y no a las ideas de los médicos sobre las enfermedades.
Ya que si conocemos los síntomas, mediante el triángulo psique-cerebro-órgano, podemos ubicarnos en la brújula de Hamer, saber si estamos en fase activa o en fase de reparación, conocer el tipo de conflicto biológico que desencadenó la enfermedad, saber si está resuelto y sino hacer algo para resolverlo.
La medicina clásica intenta combatir el síntoma, lo cual solo genera miedo en la persona que es diagnosticada y es lo mismo que atentar contra la vida de uno.
En Medicina Germánica, nos orientamos a descubrir que programa biológico está activo, en qué fase se encuentra, investigar si el conflicto está resuelto, eliminar los Rails (memorias sensoriales) asociados para que la persona puede cursar la fase de reparación en paz y lograr completar el programa biológico, para luego volver a la normotonía o normalidad.
Como verás querido lector, si nos enfocamos en el diagnóstico o etiqueta que ponen los médicos, no podemos hacer nada. Si nos enfocamos en los hechos, en lo verdadero, en los síntomas, podemos investigar qué está ocurriendo realmente y hacer algo al respecto.
“La imagen no es la cosa” repitió durante más 50 años Jiddu Krishnamurti.
El ejemplo más claro de cómo un diagnóstico o etiqueta médica nos aleja de la posibilidad de hacer algo es el del síndrome de Down. La medicina clásica hoy lo llama “el síndrome de la trisomía 21” y acusan al “cromosoma 21” de ser el responsable de tal enfermedad.
Antes lo llamaban “síndrome de Down o mongoloide” y antes aún le decían “el síndrome de la sierra circular”. Se sabía que si las mujeres embarazadas se exponían a un fuerte chillido, esto podría provocar discapacidades en los niños.
Entonces la causa era muy conocida. Por supuesto, con este conocimiento se podría proporcionar una protección mucho más eficaz tanto para el embrión como para la madre. Evidentemente, este no era el objetivo.
¿Por qué otra razón se habría cambiado el nombre relacionado con la causa (síndrome de sierra circular) a un nombre relacionado con el síntoma orgánico (mongoloide o síndrome de Down)?
¿Será para que toda medida de protección genuina para la madre y el niño sea imposible desde el principio?. Por tanto, se nos ha robado nuestro conocimiento de la causa. Se nos roba deliberadamente cualquier conocimiento que nos permita asumir la responsabilidad personal , y por lo tanto, nuestra libertad.
Querido lector ¿no te parece esto muy sospechoso?
El antiguo diagnóstico de “Síndrome de la sierra circular” nos daba un panorama mucho más amplio de lo que podría haber causado esta enfermedad. El Dr. Hamer presenta el caso de Anita, una chica que nace con síndrome de down, cuyos padres no aceptaron la sentencia médica y siguieron buscando sin cesar una solución a su problema. Es allí cuando se enteran del Dr. Hamer y lo van a ver.
El Dr. Hamer en ese momento les fue sincero y les dijo que a pesar de que conocía muy bien la enfermedad, aún, nunca la había investigado según las leyes de la biología, pero que si gustaban él podía realizarle a Anita una Tomografía de cerebro sin contraste y buscar si aparecían focos de Hamer y de esa manera elaborar alguna estrategia para ayudar a Ana.
Para la sorpresa del Dr. Hamer y de los padres de Anita, al investigar las tomografías el Dr. Hamer encuentra dos focos de Hamer activos, uno en cada relá auditivo. Así es como se da cuenta de que Ana había vivido conflictos auditivos los cuales estaban activos.
Sin lugar a dudas, si hubiésemos conocido la antigua etiqueta “el síndrome de la sierra circular” no nos hubiésemos sorprendido y desde un inicio habríamos buscado el ruido que estuvo presente, para luego elaborar una estrategia donde sea identificado el ruido y eliminado.
En el caso de Anita así fue, el papá de Anita trabajaba en su casa con una cierra circular cortando caños de metal, para refaccionar los órganos de las iglesias en Alemania. Ese chillido intenso había estado presente durante todo el embarazo de Ana.
El Dr. Hamer no solo nos brinda la posibilidad de evitar situaciones como la de Anita al entender el cuerpo y sus programa biológicos, sino que descubre que el síndrome de down realmente se origina por fuertes ruidos durante la vida intrauterina (gritos, explosiones, peleas, parlantes, cierra circular, amoladoras, martillos neumáticos, amplificadores, disparos, ultrasonido, etc); también descubre que puede ser revertido en un 100% y lo demuestra con el caso de Anita.
Hoy sabemos que si la futura madre se expone a fuertes chillidos, el niño puede sufrir esto como un conflicto auditivo doble, (dos DHS) y entrar en varias constelaciones (conjuntos de conflictos biológicos, que no generan lesión orgánica pero sí generan un cambio de comportamiento, como el autismo, la paranoia, la mitomanía, etc).
Como en cualquier constelación, esto va acompañado de una parada en la madurez emocional y los síntomas orgánicos del síndrome de Down.
Las mujeres a menudo ni siquiera saben que están embarazadas todavía. Imagina querido lector, una mujer que trabaja en el aeropuerto con protección auditiva debido al ruido de las turbinas o una mujer que mientras está embarazada trabaja en un aserradero, como ya hemos visto varias veces a lo largo de los años.
Imagínate los fuertes ruidos que vive la madre en esos casos y cómo los vivirías tú, de la misma manera o incluso peor, lo percibe un niño en el útero, ya que el líquido amniótico transmite ondas sonoras mucho más directamente a todo el cuerpo del niño, ya que el agua (parte del líquido amniótico) amplifica siempre las ondas a las cuales está expuesta. El embrión también escucha un examen de ultrasonido como si alguien disparara una ametralladora junto al banco en el que está sentado.
¿Te imaginas que esto podría ser conflictivo para un embrión?
En el pasado, la gente conocía la causa..
El enfoque de hoy en día en la medicina de Pasteur es solo en el “cromosoma 21”, multiples medicamentos y “tratamientos”, lo que solo sirven para hacer un negocio de la enfermedad y distraer la atención de la causa real, continuar echando culpas y quitarnos la posibilidad de evitar algo que en algunos casos sería totalmente evitable. Lógicamente si un transformador explota inesperadamente en la calle mientras salgo a dar un paseo, es un hecho que no podría haber evitado.
Es por esto que los choques biológicos no se pueden evitar, pero sí se pueden resolver. De todos modos aquí estamos hablando de evitar situaciones que sí podríamos evitar, de la misma manera que evitamos meter las manos en el fuego para no quemarnos.
¿Cómo sería una estrategia a aplicar en este caso según los descubrimientos del Dr. Hamer con las leyes de la biología?
Lógicamente la atención estará focalizada en la causa, es decir, el conflicto biológico auditivo. En este caso, resolver el conflicto no es realmente posible, ya que la persona afectada ha sufrido este conflicto a más tardar seis meses antes de su nacimiento y se ha detenido exactamente ahí en su desarrollo de madurez emocional. Uno puede y debe evitar los Rails o memorias sensoriales, en este caso los “ruidos”.
El DHS detonante fue causado por ruidos. Entonces, si ahora digo de forma bastante sencilla que la persona afectada es “alérgica” al ruido, de repente todo el mundo comprendería lo que hay que hacer. No habría dudas ni preguntas.
¿Qué hacer con las alergias?
Sin dudas, hay que evitarlas, al menos hasta poder hacer consciente el “Rail” y reeducar a nuestro cerebro con ese recuerdo sensorial para que deje de afectarnos. En un principio lo que tenemos que hacer para poder recuperarnos es evitar los “Rails” y los conflictos que detonaron el programa biológico, por ejemplo el polen, la leche, el pelo de gato o simplemente el ruido, los cuales estuvieron presentes durante el choque biológico vivido por la persona.
Además cualquier persona que haya tratado con niños con síndrome de down, sabe que estos chicos, ante cualquier ruido se tapan los oídos fuertemente para no escucharlos, con un poco de atención podrían sin lugar a dudas verificar la afirmación de la “alergia a los ruidos”.
Es importante también destacar que la naturaleza no psicologiza. La naturaleza funciona biológicamente. La psicología no funciona en la naturaleza, ni tampoco con los programas biológicos o enfermedades. Entonces, lo que debemos aprender primero es a pensar biológicamente, a entender los programas biológicos.
Por ejemplo, no se puede quedar embarazada con psicologizar, tan pronto como se cumplan las condiciones biológicas (terreno) eso ocurre. Psicologizar tiene poca influencia en los “Programas Especiales Biológicos y Sensatos” (SBS) de nuestro cuerpo, que también llamamos enfermedades. Nadie puede cambiar un pensamiento practicado de toda la vida de la noche a la mañana.
Esto requiere tiempo, práctica y una formación sólida en medicina Germánica.
Lo que sí podemos hacer es dejar de financiar un sistema bélico médico que solo nos enferma, el cual solo financiamos porque estamos totalmente confundidos. Pagar una obra social es invertir en una enfermedad, suponiendo que algún día me “agarraré” una enfermedad tan letal que no podré pagarle al médico para que me “cure”. Espero querido lector que a esta altura, ya no tengas dudas de que conviene y que no.
…y dejaron de consumir y el sistema se cayó.. (Frase magistral de la película censurada en todo el mundo, “La belle Verte” o “planeta libre” estrenada en 1996).
Las dos imágenes son de Anita, la foto de la izquierda es de cuando tenía el síndrome de down (DHS auditivo) y la foto de la derecha muestra a Anita sin rasgos mongoloides, las mismas son de un caso presentado por el doctor Hamer.
Hay 3 meses entre las dos fotos de la pequeña Ana. Hoy Ana puede vivir una vida independiente completamente normal, sin rastros de aquel diagnóstico.
Aquí el Dr. Hamer nos presenta un caso de remisión completa del síndrome de down. Ahora querido lector, puedes darte una idea de cómo la etiqueta puesta por la medicina clásica solo complica las cosas, nos confunde y genera más conflictos en las personas, como si no fuera suficiente conflicto vivir..
Esta no es la única etiqueta con la cual nos engañan, sino ¡todas!.
El mismo engaño ocurrió con el caso de la “Poliomielitis”. Supuestamente para todos nosotros en 1988 gracias a un “esfuerzo en vacunar a la población” la polio ha sido erradicada. Si investigamos los síntomas físicos de la polio, nos encontraremos con los mismos síntomas para los cuales hoy diagnostican esclerosis, estos síntomas son: dolores musculares, entumecimientos, parálisis, atrofia muscular, debilidad muscular, dolor de cabeza, fatiga crónica, entre otros, así es..
¡Los mismos síntomas para las dos enfermedades!
Solo le cambiaron el nombre, para no perder su negocio, con la antigua vacuna, y cómo son “buenos empresarios” para generar nuevos negocios crearon nuevos medicamentos y tratamientos millonarios para la esclerosis.
En medicina Germánica el diagnóstico de “Esclerosis” o “Polio”, no nos engaña, aquí siempre buscamos síntomas reales. No hay dos “procesos de enfermedad igual” pueden haber síntomas similares, pero nunca los mismos , ya que cada persona tiene sus propios conflictos. Podemos observar siempre que hay tres choques biológicos como mínimo que se repiten en estos casos, en primer lugar, un “gran susto paralizante” (Ectodermo, corteza cerebral, motricidad de algún músculo involucrado en el contexto del susto e inhibición del movimiento).
En segundo lugar un choque biológico de “profunda desvalorización” (Nuevo Mesodermo, Sustancia Blanca, responsable de la nutrición ósea y muscular) y en tercer lugar un choque biológico de “derrumbamiento de la existencia: (Endodermo, Tronco cerebral, túbulos colectores del riñón).
Además de la confusión del síndrome de down y de la esclerosis múltiple, podríamos mencionar un sin fin de enfermedades en las cuales nos han engañado, como en el caso del autismo, el síndrome de Asperger, la esclerosis lateral amiotrófica, el lupus, todos los tipos de cáncer, la gripe con todas sus variantes, etc.
Querido lector, hasta ahora nadie nos había enseñado a investigar la causa de los síntomas, sino todo lo contrario, a responsabilizar de la enfermedad a los insectos y los animales, como en la “gripe aviar”, al mosquito con el “dengue”, al “mal de chagas” con el insecto triatomino, al coronavirus, al hanta virus, del HIV con los monos, a nuestra familia con las supuestas enfermedades hereditarias, a nuestro cuerpo con las supuestas enfermedades inmunológicas o algún tipo virus.
Es por esto que nunca podríamos habernos dado cuenta sin la ayuda del Dr. Ryke Geerd Hamer del engaño al cual estábamos sujetos. La mentira es tan grande que nunca hubiésemos puesto en tela de juicio a los “expertos”.
Querido lector podríamos seguir enumerando todas las estafas de la medicina clásica varios días, pero estos ejemplos simplemente son para que podamos juntos entender la importancia de los descubrimientos del Dr. Hamer para nuestra sociedad.
¿QUE PAPEL JUEGAN LOS MICROBIOS?
Esta ley explica qué papel juegan los microbios en la enfermedad.
Es lo que llamamos el sistema ontogenético de los microbios. Explica cómo será el trabajo de los microbios durante el SBS aclarando que los microbios siempre fueron nuestros fieles aliados y nunca atentaron contra nuestra biología.
Siempre hacen trabajos de reparación orgánico.
Los microbios no causan enfermedades sino que nuestro cuerpo los usa, siguiendo las instrucciones del cerebro, para optimizar la fase de reparación, si están disponibles. En el momento de solución del conflicto, éstos reciben una señal del cerebro para comenzar a trabajar en la tarea que les fue asignada, causando la inflamación, como fase previa a la reparación.
¿CUAL ES EL SENTIDO BIOLOGICO DE LA ENFERMEDAD?
Esta ley explica cuál es el sentido biológico de cada enfermedad, es decir “el para qué” de la enfermedad.
Descartando por completo la posibilidad de que estas sean el resultado de un contagio, de una enfermedad hereditaria, genética o autoinmune.
Es la ley de la comprensión, de que las “así” llamadas enfermedades corresponden a un sentido biológico especialmente programado por la naturaleza, lo que conocemos como quintaesencia. Cada par de enfermedades tal como ha quedado descrito es un “programa especial de la naturaleza con un sentido” (SBS), desarrollado a lo largo de la evolución para permitir a los organismos salir de su funcionamiento ordinario para lidiar con situaciones particulares de emergencia.
Cuando en 1992 le preguntaron al Dr. Hamer sobre la quinta ley biológica, él dijo que la quinta ley biológica, verdaderamente es la quintaesencia de las cuatro leyes biológicas que le preceden. Esta quintaesencia no solo contiene las previas leyes estrictamente científicas pero también abre una nueva dimensión. Es de cierta manera el alma de la Medicina Germánica. Es más, de un salto, esta “Quinta Ley Natural” nos permite conectar los hechos científicos con aquello que antaño pensábamos era algo trascendental, sobrenatural, parapsicológico o que solamente la religión podía explicar, algo que sentimos y experimentamos pero que no había cabido en el marco del modelo científico. Esta ley nos permite percibir una conexión comprensible al universo que nos rodea y del cual formamos parte. Esencialmente, cada enfermedad debe ser entendida como un programa biológico de la naturaleza, procedente de la evolución y con definido propósito. En otras palabras, cada enfermedad manifiesta un programa específico que resuelve un conflicto biológico excepcional e imprevisto. Es una nueva forma de ver la enfermedad como un programa biológico significativo de la naturaleza interpretado a través de la evolución de las especies.
Podemos ahora por vez primera ver y entender no solamente que existe un orden natural sino también que cada proceso individual de la naturaleza tiene significado especial con respecto a todo lo existente.
Estas 5 leyes de la naturaleza se encuentran reflejadas en lo que conocemos como Brújula de Hamer.
Espero que este articulo motive al lector a formarse en la apasionante ciencia de la vida, la MEDICINA GERMANICA del Dr. Ryke Geerd Hamer.
Gracias por leer este articulo
Gaston Vargas
Muchas gracias de corazón DON GASTON VARGAS por enseñarnos a ser LIBRE ya que el status quo nos ha engañado durante TODA LA VIDA y especialmente en la medicina aleopata pienso que esto TAN IMPORTANTE EN LA VIDA DE TODO SER HUMANO ya que usted traspasa estos conocimientos del DR. HAMER tengo la esperanza que algún día se sabran en la medicina aleopata mundial no así en la industria farmacéutica que es tan poderosa, lo he entendido con tanta facilidad y ahora respiro aires de mucha libertad en mi. Le reitero MUCHAS GRACIAS DON GASTON estaremos en contacto.
Saludos y gracias por su comentario!
Lloré. Gracias, no hay palabras de agradecimiento suficientes.